El nacimiento Siloé destaca por su composición arquitectónica en altorrelieve, que recrea el interior de una antigua construcción de piedra como fondo de la escena de la Natividad.
El Niño Jesús, situado en el centro, es adorado por la Virgen María y San José en actitud recogida.
A su alrededor, el buey, la mula y un ángel completan la escena, junto con elementos en segundo plano como un pastor y la palmera del fondo, aportando dinamismo y riqueza narrativa.
Materiales y diseño.
Escultura realizada en alabastro moldeado con pátina antigua.
El acabado enfatiza los relieves con matices ocres y sombras que refuerzan el aspecto de piedra tallada envejecida.
El conjunto es de una sola pieza y presenta un modelado lleno de detalles minuciosos:– La arquitectura de fondo simula una ruina con piedras talladas.
– San José aparece arrodillado, inclinado hacia el Niño con expresión de ternura.
– La Virgen María se inclina desde la derecha, con gesto reverente.
– Los animales y figuras secundarias se integran en el mismo bloque de manera armónica, dando profundidad y cohesión al conjunto.
Características y medidas.
– Altura proporcional de San José: 37 cm.
– Medidas totales del grupo: 37 cm alto, 40 cm ancho, 12 cm fondo.
– Proporción necesaria del entorno: 30 a 40 cm.
– Tipo: Grupo compacto (una sola pieza).
– Material: Alabastro moldeado.
– Acabado: Pátina antigua.
– Autor: Enrique Orejudo Alonso.
Uso devocional o decorativo.
Perfecto para vitrinas amplias, entradas, salones o capillas domésticas.
Al tratarse de una pieza maciza, su estabilidad y estética la hacen adecuada para exposición permanente o en campañas litúrgicas de Navidad.
Muy valorada como pieza decorativa por su riqueza escultórica y sentido artístico.
Resumen.
Una representación clásica y sólida de la Natividad, donde la arquitectura, los gestos y el simbolismo se funden en un relieve escultórico con gran fuerza visual.
Ideal para quienes buscan una pieza de presencia artística con sello artesanal.
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