Descripción |
Conjunto de castañera en plena faena, tostando castañas en un fogón de leña, acompañada por su mesa de venta y un toldo que protege el puesto. La figura transmite la vida popular y el ambiente cálido de los mercados tradicionales, añadiendo movimiento y realismo a la escena del belén. La postura inclinada de la vendedora, removiendo las castañas, refuerza la sensación de acción. Materiales y diseño. Realizado en barro cocido con aplicación de telas naturales encoladas, trabajadas artesanalmente para dar volumen a las vestiduras. La castañera viste túnica oscura con manto rojo, policromados al óleo con gran riqueza cromática. El puesto incluye una mesa de madera con castañas y utensilios, un fogón con troncos encendidos y un toldo superior de tela, todo modelado y pintado a mano. Características y medidas. Altura de la figura: 14 cm (escala proporcional al San José de 14 cm). Mesa: 8 cm de alto x 10 cm de ancho aprox. Fogón con castañas: 9 cm de alto x 7 cm de ancho aprox. Proporción necesaria para el belén: entre 12 y 16 cm. Material: terracota y tela natural encolada. Acabado: policromía al óleo, pintado artesanalmente. Uso recomendado. Ideal para escenas de mercado y oficios dentro del belén, aportando calidez y un aire de vida cotidiana. La castañera es un símbolo popular que da riqueza y variedad a la representación. Resumen. Grupo de castañera con puesto y fogón, de 14 cm, realizado en barro y tela encolada, pintado al óleo en talleres murcianos. Una pieza artesanal de estilo salzillesco que aporta autenticidad y dinamismo al belén. .
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Grupo escultórico realizado por el maestro José Luis Mayo Lebrija. Representa a dos personajes: una mujer de pie junto a un cántaro apoyado en el brocal de un pozo, vestida con túnica anaranjada con cenefas geométricas y manto claro; y un joven sentado en un banco rústico tocando una lira, con vestidura sencilla en tonos marrones. La escena evoca un momento de descanso y convivencia cotidiana, aportando frescura y dinamismo al belén. Materiales y diseño. Elaborado en pasta cerámica y policromado a mano. Destacan los detalles en la expresión serena de la mujer, el gesto del músico tocando el instrumento y el acabado realista de los elementos arquitectónicos, como el pozo y el banco. José Luis Mayo logra una composición equilibrada que combina la vida popular con la tradición belenista. Características y medidas. Escala: 24 cm (altura de San José en este belén). Altura real estimada de las figuras: 24 cm la mujer y 18–19 cm el joven sentado. Medidas visibles aproximadas del grupo: 24 × 18 × 12 cm (alto × ancho × fondo). Uso recomendado. Ideal para belenes de 24 cm, este grupo se adapta a escenas de aldea, descanso o fuente. Aporta un aire de humanidad y cercanía, mostrando la vida sencilla que rodeaba al nacimiento de Jesús. Resumen. Una escena en barro policromado hecha en España por José Luis Mayo, perfecta para enriquecer el belén con un conjunto lleno de naturalidad y expresividad en la escala de 24 cm. .
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La devoción a la Triple Santa Ana representa una escena única de la tradición cristiana: Santa Ana, madre de la Virgen María, sostiene a su hija y a su nieto, el Niño Jesús. Esta imagen muestra a las tres generaciones unidas en un mismo acto de fe y maternidad sagrada. El conjunto transmite protección, enseñanza y ternura, simbolizando el papel fundamental de la familia en la transmisión de la fe. Materiales y diseño. Figura elaborada en resina de poliéster y pintada a mano con tonos oro, burdeos y detalles negros. Santa Ana aparece con túnica decorada en dorado y capa con ribetes labrados. En sus brazos sostiene a la Virgen María niña, coronada, quien a su vez lleva al Niño Jesús en actitud de bendición. En la base, se lee la inscripción ORA PRO NOBIS BEATA ANA. Medidas. Altura: 20 cm. Base: 8 x 6 cm. Acabado. Acabado brillante con aplicaciones de pan de oro en los bordes del manto y detalles minuciosos en los rostros y vestiduras. La pintura resalta con brillo y textura, y el conjunto forma una escena armónica y solemne. La base sólida garantiza estabilidad visual y física. Uso devocional. Ideal para altares familiares, capillas, catequesis y como regalo significativo para madres, abuelas o educadores cristianos. Muy apreciada por quienes veneran a Santa Ana como patrona de la familia y la educación en la fe. Resumen. Una imagen de gran simbolismo y belleza que nos recuerda la importancia de la transmisión del amor a Dios entre generaciones. Una presencia devocional que fortalece la fe en el seno del hogar cristiano..
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