Pendientes de porcelana y plata de ley bañados en oro. La exuberante belleza de las aves tropicales con su espectacular plumaje y sus vivos colores inspira esta colección de joyas creada por los artistas de Lladró..

Imagen de San Leonardo de Noblac, monje y patrono de los prisioneros, representado en hábito marrón, con cruz colgada al pecho, una cadena en la mano y un ternero a sus pies, símbolo de libertad y protección.
Su figura transmite mansedumbre, intercesión por los cautivos y poder liberador desde la fe.
Materiales y diseño.
Talla artesanal realizada en madera de tilo o arce por escultores italianos de Val Gardena.
La figura se muestra de pie, con una postura serena y gesto de bendición.
La cadena, esculpida con realismo metálico, cuelga desde su brazo izquierdo.
El ternero, esculpido con delicadeza, mira al santo con expresión confiada.
El conjunto resulta equilibrado y accesible visualmente.
Medidas.
Altura:
a elegir con el selector.
Base:
moldurada, de forma poligonal, con base sobre pradera tallada en relieve.
Acabado.
Acabado a elegir con el selector.
Disponible en versiones policromada, patinada, barnizada o natural.
En la versión policromada predominan los tonos marrones y ocres en el hábito, con detalles dorados en la cruz y tonos naturales en el animal.
El acabado natural permite disfrutar del volumen y la nobleza de la talla sin elementos cromáticos añadidos.
Uso devocional.
Ideal para capillas penitenciarias, vitrinas devocionales, parroquias rurales, espacios de oración por la libertad interior o como obsequio espiritual para quienes trabajan con personas privadas de libertad.
También invocado como protector frente a peligros y enfermedades.
Resumen.
Una figura serena y simbólicamente poderosa.
Esta talla de San Leonardo une compasión, espiritualidad monástica y mensaje de redención, en una obra que transmite esperanza desde la humildad..

San Elías, profeta del Antiguo Testamento, es conocido por su celo por Dios, su vida austera y su papel crucial como defensor de la fe frente a la idolatría.
Esta figura lo representa con túnica profética, corona simbólica de autoridad divina, una espada en una mano y el dedo índice de la otra apuntando al cielo, gesto que evoca su llamado al pueblo a volver al Dios verdadero.
Es patrono del Carmelo y modelo de vida contemplativa y profética.
Materiales y diseño.
Figura realizada en resina de poliéster, pintada a mano.
San Elías aparece de pie con túnica blanca y manto rojizo, barba blanca y corona dorada.
Sostiene una espada curva en la mano izquierda y con la derecha señala hacia el cielo.
La base es circular, dorada, con cenefa decorativa en relieve.
Medidas.
Altura:
12,5 cm.
Base:
circular, aprox.
5,5 cm de diámetro.
Acabado.
Pintura satinada con tonos tierra.
El contraste entre la túnica clara, el manto rojo y el metalizado de la espada y la base ofrece una estética equilibrada.
El rostro es sereno pero determinado, con gesto de firmeza profética.
Uso devocional.
Ideal para altares domésticos, comunidades carmelitas, conventos o personas que oran por el don del discernimiento, el espíritu de verdad o viven una vocación contemplativa o profética.
También apropiada como símbolo de combate espiritual.
Resumen.
Una figura fuerte y simbólica que representa el coraje, la fidelidad y la voz de Dios en medio de las tinieblas.
San Elías nos recuerda que la verdad, cuando es vivida con integridad, siempre apunta hacia lo alto..