Santa Ana, madre de la Virgen María, es símbolo de la educación en la fe, la transmisión de la sabiduría y la ternura familiar.
Esta imagen la representa junto a la Virgen Niña, enseñándole las Escrituras, en un gesto que refleja el vínculo entre generaciones y la importancia de la formación espiritual desde la infancia.
Materiales y diseño.
Realizada en resina de poliéster y pintada a mano, la figura presenta a Santa Ana con túnica granate y manto azul, mientras sostiene con dulzura a la pequeña María, vestida de rosa.
Ambas comparten un rollo de pergamino, símbolo de enseñanza.
Los rostros están modelados con expresión afable y maternal.
La base es redonda, decorada con una greca dorada clásica.
Medidas.
Altura:
11 cm.
Base:
4 x 3 cm.
Acabado.
Colores suaves y bien combinados, con detalles dorados en la base y en los ribetes de los vestidos.
El acabado es limpio y realza la escena familiar y formativa que representa.
Uso devocional.
Ideal para madres, abuelas, educadores, catequistas o quienes valoran la transmisión de la fe en el hogar.
También recomendada para oratorios domésticos, colegios religiosos o como regalo espiritual en bautizos y primeras comuniones.
Resumen.
Una imagen entrañable y significativa, que transmite ternura, sabiduría y continuidad en la fe.
Perfecta para recordar el papel fundamental de las familias en la vida espiritual..

San Gregorio Hernández, conocido como el “médico de los pobres”, fue un médico venezolano de profunda fe y vida ejemplar, en proceso de beatificación.
Esta imagen lo representa de forma popular, con traje negro, sombrero y bigote, tal como se lo recuerda en su servicio desinteresado a los necesitados.
Es ampliamente venerado por su intercesión en temas de salud, estudios y auxilio en momentos difíciles.
Materiales y diseño.
Modelada en resina de poliéster y pintada a mano, la figura muestra a San Gregorio de pie, con expresión serena y manos detrás de la espalda.
Viste un traje negro tradicional, corbata, camisa blanca y sombrero, como símbolo de su humildad, profesionalismo y cercanía al pueblo.
La base circular está decorada con cenefa en tono dorado envejecido.
Medidas.
Altura:
10 cm.
Acabado.
Colores sobrios, con énfasis en el negro brillante del traje y los detalles dorados de la base.
El rostro está cuidadosamente pintado, con bigote fino y mirada recogida.
El acabado resalta su figura respetuosa y sobria.
Uso devocional.
Especialmente recomendado para quienes piden por temas de salud, para médicos, enfermeros, estudiantes de medicina o personas con fe sencilla que buscan protección espiritual.
Ideal para tener en casa, consultas, escritorios o llevar consigo en momentos de prueba.
Resumen.
Una imagen entrañable de San Gregorio Hernández, sencilla pero profundamente significativa, que recuerda el poder de la caridad cristiana y la entrega silenciosa al prójimo..

Este cáliz de estilo clásico destaca por su poderosa simbología bíblica
Decorado con los rostros simbólicos de los Cuatro Evangelistas —el ángel (Mateo), el león (Marcos), el toro (Lucas) y el águila (Juan)—, está concebido como una pieza catequética y litúrgica que subraya la raíz apostólica del Evangelio
Materiales y diseño
Fabricado en metal plateado con interior de la copa bañado en oro de 24 quilates, este cáliz presenta una superficie texturizada con efecto martelé
En el cuerpo se disponen cuatro medallones en relieve con los símbolos de los Evangelistas, tallados con expresividad en estilo lineal clásico
El fuste, de forma sólida y troncocónica, incorpora una banda decorativa con círculos en relieve, aportando dinamismo visual y una estructura robusta
Medidas
Altura:
15 cm
Diámetro de la copa:
10,5 cm
Disponible en otros acabados bajo pedido
Uso litúrgico
Ideal para celebraciones con un marcado carácter bíblico o catequético, especialmente fiestas litúrgicas relacionadas con los Evangelistas o el Año Litúrgico
También es excelente como cáliz de uso frecuente o como regalo sacerdotal con significado teológico profundo
Un cáliz que proclama la Palabra desde sus raíces apostólicas
Su diseño envolvente y sus símbolos tallados hacen de esta pieza una joya de contemplación litúrgica, perfecta para el servicio del altar con belleza y mensaje.