Corona metal virgen pilar 110mm

Diámetro total: 110 mm.
Fondo: 1 cm aprox.
Tipo: corona radiante independiente.
Material: metal bicolor (dorado y plateado).
Acabado: brillante.

Las coronas religiosas son uno de los elementos más bellos y significativos del arte sacro. Símbolo de gloria, pureza y realeza celestial, coronar a una imagen sagrada es reconocer su dignidad y su papel en la historia de la salvación. Desde los primeros siglos, la Iglesia ha empleado la corona como signo visible de honor y devoción, especialmente en las imágenes de la Virgen María, de los santos y del Niño Jesús.

En el caso de la Santísima Virgen, la corona representa su realeza como Reina del Cielo y Madre de Dios. En las imágenes de santos, evoca la gloria alcanzada por la fidelidad y el martirio, mientras que en las del Niño Jesús simboliza su reinado divino desde la infancia. Cada una, colocada sobre la cabeza de la imagen, es expresión de amor, fe y gratitud del pueblo cristiano.

En El Ángel Arte Sacro ofrecemos una amplia colección de coronas para imágenes religiosas, elaboradas por orfebres especializados en arte sacro, fabricadas en latón, bronce o plata de ley, con acabados dorados, plateados, envejecidos o bimetálicos. Cada pieza se realiza artesanalmente, cuidando la proporción, el equilibrio y el detalle ornamental, de manera que se adapte armoniosamente al estilo y tamaño de la imagen.

?? Coronas para Vírgenes

Las coronas marianas suelen presentar diseños imperiales o radiados, con estrellas, resplandores o flores estilizadas. Algunas incluyen aureolas con doce estrellas, en alusión a la visión apocalíptica de la Mujer vestida de sol. Los modelos más solemnes incorporan piedras semipreciosas, esmaltes o filigranas que realzan la luminosidad del conjunto. Disponibles en versiones coronales, diademas o tiaras, con sistemas de anclaje oculto o ajustable para evitar dañar la policromía de la imagen.

?? Coronas para Santos

Las coronas destinadas a santos pueden ser cerradas o abiertas, según el estilo de la talla. Algunas reproducen la corona de la victoria eterna, símbolo del triunfo del santo sobre el pecado y la muerte. Los modelos masculinos presentan líneas más sobrias, mientras que las coronas de santas y mártires pueden incluir flores, espigas, hojas de laurel o símbolos del martirio, como palmas o cruces.

?? Coronas para Niños Jesús

Las coronas infantiles se fabrican en proporciones reducidas, con diseños delicados y equilibrados. Pueden ser doradas, plateadas o esmaltadas, y en muchos casos se complementan con resplandores o aureolas pequeñas. Suelen emplearse en imágenes del Niño Jesús de Praga, del Dulce Nombre o de Belén, simbolizando la majestad del Niño Dios.

Cada modelo se elabora en diferentes diámetros y estilos, y puede personalizarse con escudos, advocaciones o grabados. También ofrecemos conjuntos de coronas con resplandores y cetros, coordinados para imágenes procesionales o de altar.

Todas las piezas de El Ángel Arte Sacro se realizan con técnicas tradicionales de orfebrería litúrgica, fundidas, cinceladas y pulidas a mano, garantizando una terminación impecable y duradera.

Más allá de su valor ornamental, la corona religiosa es un acto de veneración y reconocimiento. En ella, la Iglesia proclama que los santos y la Virgen María participan de la gloria de Cristo, y el creyente expresa su gratitud por su intercesión.

En El Ángel Arte Sacro seleccionamos coronas para imágenes que unen belleza, precisión y sentido espiritual, ofreciendo modelos de todos los estilos —barroco, clásico, gótico o contemporáneo—. Cada pieza está concebida para honrar con dignidad a las imágenes sagradas, reflejando la fe y la devoción de quienes las veneran.

Más que joyas, las coronas religiosas son símbolos de gloria eterna, testimonio de amor y arte puestos al servicio del culto divino. En El Ángel Arte Sacro, cuidamos cada detalle para ofrecer obras que resplandezcan con la luz del cielo en cada altar, capilla o procesión.

Artesanos Italianos del Arte Religioso en General.

Elegancia, técnica y tradición en el arte sacro europeo.

La denominación “Artesanos Italianos del Arte Religioso” comprende a los numerosos talleres y maestros artesanos de Italia dedicados a la escultura, orfebrería, pasamanería, pintura devocional y confección de ornamentos litúrgicos, herederos directos del esplendor artístico del Renacimiento y el Barroco.

Italia ha sido, desde hace siglos, cuna del arte cristiano. En sus regiones —Toscana, Lombardía, Veneto, Trentino o Sicilia— se conservan escuelas de imaginería y orfebrería que combinan el dominio técnico con una profunda sensibilidad espiritual. Los artesanos italianos destacan por su finura en el modelado, equilibrio de proporciones y armonía estética, cualidades que han hecho de sus obras un referente internacional.

Su producción abarca un amplísimo espectro: esculturas religiosas en madera, resina o terracota; belenes y figuras de Natividad; objetos litúrgicos; bordados eclesiásticos; lámparas de aceite; cuadros devocionales y elementos decorativos. Cada pieza es fruto de un cuidadoso proceso manual que une buen gusto, precisión y sentido de lo sagrado.

Los talleres italianos emplean materiales nobles —madera, bronce, plata, pan de oro, tejidos brocados o sedas litúrgicas— y aplican acabados de gran calidad, garantizando durabilidad y belleza. Sus obras se distinguen por una estética equilibrada entre lo clásico y lo contemporáneo, manteniendo siempre la fidelidad a la tradición iconográfica de la Iglesia.

En El Ángel, los Artesanos Italianos del Arte Religioso representan la excelencia artística del arte sacro europeo, valorada por su pureza formal, elegancia y minuciosidad, ideales para templos, altares, coleccionistas o devoción personal. Cada creación es un testimonio del vínculo entre el arte, la fe y la belleza que caracteriza al espíritu italiano.