Imagen de San Florián en resina de poliéster de 20 cm

San Florián, mártir del siglo III, es ampliamente venerado como patrono de los bomberos, protectores contra incendios y catástrofes.
Esta figura lo representa como legionario romano en acción, apagando un incendio con una jarra de agua, gesto que simboliza su misión de protección y auxilio ante el peligro.
Su imagen es signo de valentía, servicio y fe firme en la justicia divina.
Materiales y diseño.
Figura elaborada en resina de poliéster, pintada a mano.
San Florián aparece de pie con vestimenta de soldado romano:
coraza plateada, manto rojo cruzado, túnica corta verde y sandalias.
Porta una lanza en la mano izquierda y vierte agua con la derecha sobre una casa en llamas, que aparece a sus pies.
Lleva casco con pluma y su base es circular, con cenefa dorada.
Medidas.
Altura:
20 cm.
Base:
circular, aprox.
7 cm de diámetro.
Acabado.
Pintura satinada con tonos metálicos bien integrados.
La figura muestra gran detalle en la expresión del rostro, el fuego, la arquitectura, y la caída del agua.
El conjunto está muy bien proporcionado y transmite dinamismo.
Uso devocional.
Ideal para cuarteles de bomberos, hogares, instituciones de protección civil, o como obsequio para quienes se dedican al rescate o a trabajos de riesgo.
También muy recomendada para quienes desean colocar una figura de protección en el hogar contra accidentes o incendios.
Resumen.
Una figura de fuerte carga simbólica que honra la entrega silenciosa de quienes cuidan de los demás.
San Florián nos recuerda que servir con valor y fe es también un camino de santidad.